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Tipo de padre

¿Qué tipo de padre eres? ¡Descúbrelo! Cada padre cría a su hijo de manera diferente: algunos son protectores, otros fomentan la independencia. Todos tenemos nuestro estilo único, que influye en el desarrollo del niño.

Este módulo se centra en comprender tu enfoque parental. Te ayudará a identificar sus fortalezas y mejorar la relación con tu hijo.

Mejor comprensión de tu estilo parental – Descubrirás tus fortalezas y áreas de mejora.
Comunicación más efectiva con el niño – Aprenderás a responder mejor a sus necesidades.
Aumento de la confianza en la relación – Fortalecerás la comprensión y el respeto mutuos.
Consejos prácticos para mejorar la crianza – Obtendrás recomendaciones para apoyar el desarrollo del niño.
Vida familiar más armónica – Crearás un entorno donde el niño se sienta seguro y apoyado.

¿Quieres entender mejor tu estilo parental? Selecciona este módulo y descubre nuevos enfoques para la crianza.

Imagina que tu hijo comete un gran error y se lo admite. ¿Cómo reaccionas? Intentaré entenderlo y juntos encontraremos una solución.
Primero lo reprenderé, pero luego le explicaré cómo aprender de eso.
Sentiré ira, pero luego me daré cuenta de que es una oportunidad para educar.
Estableceré consecuencias claras para que entienda que los errores tienen consecuencias.
Prefiero ignorarlo para evitar un conflicto.

Tu hijo te dirá que quiere probar algo completamente nuevo e inesperado. ¿Cómo reaccionas? Lo apoyaré y le ayudaré a pensar en todas las posibilidades.
Le daré libertad, pero le advertiré sobre los posibles riesgos.
Voy a preguntar por qué le atrae y tratar de entender su motivación.
Primero seré escéptico, pero le daré espacio para demostrar que lo dice en serio.
Intentaré convencerlo de que es mejor seguir los caminos probados.

¿Cuál es tu enfoque sobre las reglas y la disciplina en la familia? Las reglas son importantes, pero siempre podemos adaptarlas juntos.
Cumplir las reglas es fundamental, pero siempre estoy dispuesto a escuchar argumentos.
Prefiero confiar en la confianza y la comunicación abierta en lugar de en reglas estrictas.
La disciplina es la base, sin ella reinaría el caos en la familia.
Las reglas están bien, pero no soy consistente en su aplicación.

Imagina que tu hijo tiene un conflicto con un maestro. ¿Cómo lo resolverías? Primero escucharé ambas partes y solo entonces sacaré una conclusión.
Apoyaré a mi hijo, pero también le explicaré la perspectiva del maestro.
Le diré que debe saber cómo arreglársela solo, pero estoy aquí si necesita ayuda.
Inmediatamente iré a resolver la situación con el profesor en persona.
Lo dejaré así, con el tiempo se resolverá por sí mismo.

¿Cómo reaccionarías si tu hijo estuviera pasando por un momento difícil, pero no quisiera hablar de ello? Estaré a su lado y le daré tiempo para que se abra cuando esté listo.
Encontraré la manera de mostrarle suavemente que estoy aquí para él.
Intentaré ayudarlo a través de actividades conjuntas y conversaciones indirectas.
Voy a insistir en que se me confíe algo; al fin y al cabo, soy su padre.
Lo dejaré, que lo resuelva solo, pues cada uno debe pasar por sus propios problemas.

Tu hijo te dirá que tiene una opinión completamente diferente a la tuya sobre una cuestión importante de la vida. ¿Cómo reaccionarías? Intentaré entender su punto de vista y discutir sin presiones.
Lo apoyaré en que forme sus propias opiniones, aunque no esté de acuerdo con ellas.
Intentaré mostrarle mi punto de vista, pero no lo obligaré a nada.
Voy a intentar convencerlo de que mi punto de vista es el correcto.
Voy a estar decepcionado, pero no lo voy a resolver, cada uno al final encontrará su camino.

¿Qué ambiente tratas de crear en casa? Abierto y solidario, donde cada uno puede ser uno mismo.
Armoniosos, donde todos se respetan y tienen límites claros.
Relajado, donde hay mucha libertad y lo menos posible de tensión.
Estructurado, donde cada uno sabe lo que se espera de él.
Adaptable, para que cada uno se sienta cómodo según sus necesidades.

Tu hijo llega a casa con un gran éxito. ¿Cómo reaccionas? Sinceramente estoy emocionado por él y lo celebraremos juntos.
Le diré que estoy orgulloso de él y le preguntaré qué lo motivó.
Lo apoyaré, pero le recordaré que es importante no dormirse en los laureles.
Lo alabaré, pero no me exageraré para que mantenga la humildad.
Lo dejaré así, los éxitos son parte de la vida y no hay que sobrevalorarles.

¿Cómo resuelves conflictos en la familia? Una discusión donde cada uno puede expresar su opinión.
Busco un compromiso para que todos estén al menos un poco satisfechos.
Doy espacio para que se calme y lo resolvemos más tarde.
Tengo una inclinación a tomar decisiones desde una posición de autoridad.
Prefiero tratar de evitar conflictos en lugar de resolverlos.

¿Qué tipo de padre te gustaría ser? Apoyador y comprensivo, para que el niño se sienta seguro.
Motivador para tener el valor de probar cosas nuevas.
Abierto, para que pueda compartir todo conmigo.
Estricto, pero justo, para que tenga límites firmes.
Flexible para que pueda adaptarme a sus necesidades.